02 julio 2014

Reseña de "Pequeños Detectives de Monstruos"

"Pequeños Detectives de Monstruos" es un juego de rol creado (e ilustrado) por Patricia de Blas y Álvaro Corcín, y publicado por la editorial "Nosolorol". Es un juego pensado especialmente para que lo jueguen los más pequeños de la casa, y en él estos interpretan a miembros de la Agencia de Detectives, valientes niños y niñas dedicados a encontrar y capturar a los monstruos que viven en las casas y se dedican a comerse nuestros calcetines, esconder nuestros juguetes y hacer ruidos que nos asustan por la noche

El aspecto del libro

Una de las primeras cosas que destaca de este juego es el diseño gráfico y las ilustraciones. Tanto uno como otras son obra de los autores, y la edición es una gozada. Parece realmente un libro infantil de los que se hacen ahora (es decir, impresionantes), y el hecho de que todas las ilustraciones mantengan el mismo estilo ayuda mucho a mantener el espíritu de la obra en todo momento. Es un libro de dimensiones pequeñas y no muchas hojas (no llega a las 100) pero cada página incluye al menos un dibujo de un detective, un monstruo, un gamusino u otro tipo de ilustración o detalle gráfico. Y cuando digo cada página no exagero; creo que el prólogo son las dos únicas dos hojas que no tienen una ilustración.

Si a esto le añadimos una cubierta en tapa dura que parece que va a resistir lo suyo, y hasta una serie de pegatinas y fichas de cartón que, lo siento, no voy a destroquelar jamás porque odiaría perderlas :D, podemos decir que estamos ante un libro realmente mimado en lo que a edición y aspecto gráfico se refiere. Un 10.

El juego

El objetivo de este juego se indica explícitamente en las primeras páginas: es un juego de rol pensado para que lo puedan jugar niños (y adultos) de 3 años en adelante. Y, más concretamente, a los niños que pueden tener miedo "al coco" o a los monstruos que se esconden en el armario o debajo de la cama. Al darles a los niños la oportunidad de enfrentarse a estos monstruos imaginarios en el ámbito de un juego se pretende que puedan superar sus miedos y aumentar su confianza. Lo cual me parece un objetivo muy loable.

El papel que en otros juegos de rol se atribuye al director de juego (preparar la partida, pensar en los desafíos y oponentes, dirigir la trama y arbitrar) en este juego lo lleva a cabo el "detective veterano" que normalmente será un adulto o al menos un niño más mayor que el resto, que es el que irá orientando la partida. Pero dentro del mundo de juego es un participante más, aunque con un poco más de responsabilidad.

Cada partida se plantea dentro de una misma estructura: los detectives llegan a una casa en la que se sospecha que hay un monstruo y comienzan a investigar. A medida que exploran la casa van encontrando pistas como puertas y ventanas abiertas, extrañas pisadas o ropa mordisqueada. Si en algún momento alguien quiere realizar una acción como buscar un objeto o realizar alguna acción física complicada, se tiran tres dados y se eliminan los dados que hayan obtenido el resultado mayor y el resultado menor, quedándose con el del medio (una tirada de 1 - 1 - 6 es un 1, y una tirada de 1 - 4 - 5 es un 4, por ejemplo). Normalmente una acción tiene éxito si se obtiene un 4.

Hay unas cuantas variaciones, como poder quedarse con el resultado del dado mayor si se dispone de una herramienta apropiada (la Lupa Culodevaso o la Detectilinterna, por ejemplo), y valor llamado Miedo que va aumentando a medida que los detectives van encontrando cosas extrañas y que baja cuando encuentran la explicación a estos sucesos. Y, cuando por fin aparece el monstruo escondido, el Miedo aumenta en muchos puntos y los detectives tienen que hacer una tirada conjunta para meter al monstruo en un Frasco de Cristal que le convierta en un monstruo bueno.

No existe como tal una hoja de personaje o estadísticas de juego para los personajes. Existe un Contrato en el que se escribe el nombre que usará el detective (para que los monstruos no sepan su nombre auténtico), pero no existen habilidades especiales. Lo único que se puede comparar a "subir de nivel" es ir consiguiendo Insignias después de cada investigación, por haber sido valiente o un buen miembro del equipo. Algo parecido a las medallas que consiguen los boy scouts. Con estas insignias se puede tener acceso en posteriores investigaciones a mejores herramientas con las que enfrentarse a los monstruos, pero el foco del juego no está en ir aumentando de poder, sino en las investigaciones.

El contenido del libro

Como ya he comentado, el libro se presenta de un modo muy colorido y con un lenguaje sencillo que pueden entender los niños (bueno, el prólogo igual es más serio). El principio del libro se centra en describir lo que es el juego, y cómo preparar una partida, así como la forma de resolver las tiradas.

Creo que la parte más interesante es la sección en la que se describe una aventura completa, desde principio a fin, en la que unos detectives llegan a una casa y terminan capturando a un monstruo. Los ejemplos de juego siempre son interesantes de leer, pero en este caso aún más, ya que la sencillez de las reglas y la forma tan estructurada de presentar las aventuras permite que el ejemplo sea bastante exhaustivo, y creo que es bastante ilustrativo de cómo debería ser la partida. No os saltéis esta parte.

Después hay una parte dedicada a presentar herramientas que pueden usar los detectives (cada una con su ilustración correspondiente), como los Caramelos Antiverrugas (sirven para que no duelan los mordiscos de monstruos) o el Localizador, que siempre lleva el detective veterano y que sirve para saber el nivel de Miedo de una aventura. Al principio de la aventura, el detective veterano reparte estas herramientas entre el resto. Si un detective tiene una herramienta apropiada para una acción, puede quedarse con el dado que saque el mayor resultado al hacer una tirada.

La última parte del libro se dedica a dar descripciones de 16 monstruos, con su ilustración, una descripción (incluyendo un dibujo de sus huellas) y una lista de las cosas que le gustan y las cosas que le enfadan. Esto último es bastante importante porque les sirve a los detectives veteranos para decidir qué pistas dejar por toda la casa, y a todos los detectives para pensar, por ejemplo, en qué cosas hacer para enfadar al monstruo y que salga de su escondite, para poder atraparle. Si no nos gusta ninguno de los monstruos del libro, hay unas sencillas instrucciones para crear nuestros propios monstruos.

Al final de libro hay una serie de copias de los contratos de los detectives y varias plantillas para crear monstruos y aventuras.

Una partida de prueba

Confieso que cuando terminé de leer el libro me quedó la duda de si lo que se presentaba en él sería suficiente para montar una partida o no. Por suerte, dispongo en casa del perfecto grupo de juego: mis tres hijos de 8, 6 y 3 años. Así pues, ni cortos ni perezosos les propuse jugar, y aceptaron.

Lo primero que he decir es que el niño de 3 años (el detective "Solecito") no se enteró de nada. Todo hay que decirlo, no se había echado la siesta, pero aún así creo que el tema era demasiado abstracto para él. No entendió que tenía que ponerse un apodo, ni prestó demasiada atención. Quizá en otro momento consiga que esté más receptivo y se una a la partida, pero me parece que con tres años y dos meses son aún demasiado pequeños para entender el juego.

Sin embargo, también hay que decir que los detectives "Rayo" y "Luna" se lo pasaron de miedo. Rayo se armó con la Red Atrapamonstruos y Luna con el Frasco de Cristal para capturar al monstruo, pero muy pronto a medida que les describía la casa e íbamos encontrando pistas, Luna se hizo con el libro de "Pequeños Detectives de Monstruos" y empezó a leerse las descripciones de los monstruos mientras Rayo y yo seguíamos investigando. Pronto Luna terminó centrando la búsqueda en dos monstruos, el Monstruo del Armario y el Monstruo de Detrás de las Puertas.

Rayo se llevó un buen susto cuando el monstruo le pegó un mordisco en el brazo (le cogí el brazo simulando el mordisco y dio un respingo importante), pero gracias al modo en el que le atacó el, Luna pudo deducir de qué monstruo se trataba, y entre todos diseñamos un plan para atraerle al dormitorio y atraparle.

En ese momento, levanté a los niños de la mesa y me los llevé a mi habitación, y les dejé que se metieran debajo del edredón. Llevamos a cabo nuestro plan y yo hice de monstruo que llegaba al dormitorio. Rayo salió de debajo de las sábanas y me lanzó su Red Atrapamonstruos encima (en realidad, una mantita). Hicimos una tirada para ver si me atrapaba, pero no le salió bien. Mientras escapaba, Luna sacó su Frasco de Cristal y entonces hicimos una última tirada para ver si metíamos al monstruo en él. Entre todos conseguimos sacar la puntuación necesaria (¡por uno!) y pudimos regresar a la Agencia de Detectives con un nuevo monstruo que pronto se haría bueno, una vez que funcionara el gel transformador que hay en su interior.

Por cierto, para que los Frascos de Cristal se cierren, hay que decir unas palabras mágicas. A lo largo de todo el libro hay ejemplos de estas palabras, que son siempre una pequeña poesía. Luna se inventó sus propias palabras mágicas y os diría cuáles son, pero mi pequeña detective me pidió que nos las guardásemos para nosotros, de modo que fueran nuestro pequeño secreto. Me perdonaréis que cumpla esa pequeña promesa, ¿verdad?

Conclusiones

Si tenía alguna duda sobre si el juego podía funcionar bien en la práctica, la partida me las terminó de disipar. Los niños se lo pasaron estupendamente (al menos los dos mayores) y entendieron perfectamente tanto la mecánica como la ambientación propuesta.

Si tuviera que sacarle algún defecto al juego, diría que en el ejemplo de partida me encontré descrita una situación que después no encontré en las reglas: en un momento dado de la aventura, un detective arroja una Red Atrapamonstruos sobre un monstruo pero falla y éste escapa. Aún así, el valor de Miedo de la aventura baja unos cuantos puntos, pero esto (fallar y aún así que baje el Miedo general) no lo vi explicado en ningún punto de las reglas. Y no son unas reglas muy extensas, así que si está debería haberlo visto. Es un detalle muy menor, pero me fastidia que en un libro con tan pocas reglas haya un "olvido" en la descripción de las mecánicas, o en la descripción de la aventura de ejemplo [Editado el 22/09/2014: Y ahora es cuando tengo que admitir que el que ha metido la gamba soy yo, porque Álvaro Corcín, uno de los autores, me ha hecho ver que la regla sí existe, y que está en la página 16; pues vaya, ¡al final el juego es casi perfecto! :D]. Bueno, y también podríamos decir que 3 años son muy pocos años para que un niño entienda de qué va el juego. Quizá cuando tenga casi 4 el benjamín de mi casa se entere más de cómo funciona esto, pero por el momento me temo que es aún muy pequeño. Me parece que sería más realista pensar en que los jugadores sean niños de al menos 4 o 5 años.

En cualquier caso, creo que "Pequeños Detectives de Monstruos" es un producto muy bien pensado, y con una presentación sobresaliente. No es un juego de rol con el que vayas a jugar con tu grupo habitual, ni con el que puedas dirigir una intrincada campaña de intrigas y politiqueos, pero es que realmente ese no es ni su público, ni su objetivo. Este es un juego pensado para que lo juegues con niños pequeños, y ahí cumple su objetivo con creces: os aseguro que a mi hijo mediano le brillaban los ojos mientras le explicaba las pistas que iban encontrando, y que se reía nervioso mientras esperaba debajo de las sábanas para lanzarle la red a un monstruo. Y es la primera vez que mi hija mayor (que ya ha jugado a muchos otros juegos de rol como "Magissa" o "Hero Kids")... me quita literalmente un juego de rol de las manos para leérselo ella. Sólo por eso ya ha merecido la pena comprarlo.

Saludetes,
Carlos

21 comentarios:

  1. ¡Cómo mola! Con esa tarde ya has amortizado el libro, jejeje.

    A mí me pasa igual con los troquelados y las medallitas :-P De hecho, estoy mirando en las imprentas de alrededor a ver si se pueden imprimir desde el PDF en papel de pegatina, para tener material de sobra.

    Y mi Princesa ha hojeado también el libro, esas ilustraciones son el gancho perfecto. Pero tengo un cierto reparo para arbitrarle a ella sola una partida... no sé por qué, estoy esperando a que coincidamos con mis sobrinos para tener alguien más con quien jugar. A ver si lo conseguimos ^.^

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    1. Parece que somos unos fanáticos de dejar los troquelados y las pegatinas en su sitio :D.

      No creo que tuvieras problemas para jugar con un único niño (niña, en este caso), porque ten en cuenta que tú juegas también como detective veterano. Yo en tu lugar, haría una partida de prueba :).

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  2. Muchas gracias por la reseña, Carlos.

    Me enteré de la existencia de este juego hace poco y tenía curiosidad por saber un poco más del mismo. Tu reseña me despeja todas las dudas que pudiera tener :)

    Bueno, aún me queda una... ¿Cuantos detectives es un buen número para una partida?

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    1. De nada, Albert, me alegra que te haya gustado.

      Yo diría que depende mucho de la edad de los niños. Nosotros, con dos niños involucrados en la partida, jugamos fenomenal. Quizá yo no me atrevería a jugar con más de 3 o 4 (como mucho), pero no por el juego, sino porque mantener la atención de tantos críos a la vez es complicado.

      Yo he jugado ya varias partidas con niños al rol, y mientras que opino 5 adultos es un buen número (quizá un número óptimo) para jugar al rol, con niños yo bajaría la cifra a 3.

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  3. Oh, que bonito. Yo estoy en esa edad intermedia en la que todos mis primos ya han crecido demasiado cómo para hacer nada de esto y tampoco ha llegado sangre nueva a la familia, por lo que me resisto a comprar un libro que no podré usar hasta dentro de un lustro, como mínimo. Pero todo lo que leo del juego me parece muy, muy chulo... Así que supongo que a lo largo del año caerá, para tenerlo en recamara.

    ¡Genial reseña!

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    1. ¡Gracias por la felicitación! :D

      Hombre, si ahora mismo no tienes gente menuda con la que jugar, el libro no te va a hacer mucha falta. Es bonito y tal, pero creo que, si no me hubiera animado a jugarlo con mis hijos, puede que no hubiera estado igual de contento con la compra; los juegos son para jugarse, y este en concreto es para jugarse con niños.

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  4. Muchas gracias por la reseña Carlos, como todas las anteriores muy clara y concisa.

    La verdad es que este juego se lo recomendé a unos amigos que tienen niños pequeños mayores de 3 años y les pareció que tenía muy buena pinta. Evidentemente en cuanto he leído tu reseña se la he enviado para que la lean y estoy seguro que tras hacerlo no les quedará ninguna duda sobre comprarlo o no.

    Yo aún no lo puedo utilizar con mi pequeño cimmerio (tiene sólo 2 años) pero estoy deseando que crezca un poco para poder meterle en esta locura que es el rol.

    Un cordial saludo y sigue así.

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    1. Yo a mis hijos (al menos a los dos mayores... por el momento) les he metido en esta locura que es el rol a una edad bastante temprana. Creo que no es tampoco necesario empezar directamente jugando a un juego "de verdad"; también puede valer con contarles cuentos y pedirles su opinión sobre cómo deberían terminar. Hay muchas opciones.

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  5. Yo me lo he traído en la maleta. Detectives es un juego precioso y perfecto para iniciar a los niños al rol. La verdad es que los autores han hecho un gran trabajo.

    Coincido en que por debajo de 5 ó 4 es muy difícil jugar con ellos. Y no tanto por las reglas sino también por el nivel de atención o que consigan abstraerse en ciertas cosas. De todas formas es fascinante ver como van asimilando los conceptos de un juego de rol, y si les engancha, cómo disfrutan de ello.

    Una gran reseña Carlos. ¡Y muchos saludos!

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    1. Edanna, muchas gracias por las buenas palabras.

      Sí, considero que los niños muy pequeños no es que tengan un problema con el rol, sino directamente un problema de "compromiso" con una actividad. Si tienes su atención, perfecto, pero como la pierdas...

      Eso, en cualquier caso, tampoco es algo tan importante en lo que respecta al juego; es un buen juego y sirve muy bien para jugar con niños pequeños. En mi opinión, simplemente habría sido mejor poner "de 4 años en adelante" ;).

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  6. "The circle is now complete, when I left you I was but a learner. Now I am the master"

    Detective Luna

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    1. "Los alumnos tienen que superar a sus maestros, o el mundo iría para atrás, y no para adelante"

      Maestro Mariano (mi Venerado Padre)

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  7. ¡Genial la reseña, Carlos! ¿Porqué no había cosas como esta cuando eramos pequeños? :)

    Me ha encantado el concepto del juego y estoy deseando que llegue el momento de poder jugarlo con mi pequeño elfito. En nuestro caso, creo que lamentablemente aún falta bastante tiempo, así que de momento se va a la colección que le voy acumulando desde antes de que naciera.

    ¡Saludos!

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    1. No había cosas de estas cuando éramos pequeños porque el mundo del rol era aún joven. Supongo que hay que esperar un tiempo para que una afición concreta explore distintos caminos y distintos públicos, como están haciendo desde hace unos años los juegos de rol.

      Acumula, acumula. Pero cuidado, igual luego a tu crío le gusta el fútbol :D.

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    2. Puede ser, pero ¡que no sea por no intentarlo! ;)

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  8. Hola Carlos,
    Pues yo sí tuve un muy muy grata experiencia con un niño de 3 años. Simplemente hay que adaptar el juego. Un niño de 3 no entiende tanto la mecánica de un juego como uno de 8 o de 6. A esas edades los años son un abismo.
    Yo jugué con mi primo de tres años. Es un niño muy espabilado, pero ni come ni habla. A penas dice "mama", "papa", "no", "pez" y palabras con la letra a y pocas consonantes. Va al logopeda y al psicólogo, pero sin decir ni mu. Lo de la mímica lo lleva muy bien, en muy expresivo y la maestra del cole dice que lo entiende mejor que a otros que parlotean mucho. Es muy independiente y, salvo porque aparenta 2 años, puede con todos los de su clase.
    Tuve que adaptar el juego a su edad, así que hicimos un vivo.
    Empecé enseñándole todos los monstruos y le dije que eligiera el que más le gustara. Tras varias exclamaciones ante los dibujos eligió el monstruo de las ventanas. Imprimí la hoja del monstruo, para que lo viera y para que no confundiera tampoco mi rol de monstruo con el de detective.
    Luego firmamos el contrato, solemnemente, sentados en el escritorio. Lo de ponerle un nick tampoco funcionó, pero bueno, es lo de menos. Lo dejamos en detective V. Le expliqué que para cazar un monstruo necesitábamos objetos mágicos y conseguimos unas pulseras que protegían de los monstruos ¡y brillaban en la oscuridad! Y unas pegatinas de Hora de Aventuras que atraían a los monstruos.
    Mi plan inicial era pasearlo por la casa buscando al monstruo, que se viera obligado a explicarme cosas y que dijera nombres de cosas.
    Empezamos en la habitación, debajo de la cama encontré un gamusino que nos dijo que el monstruo se había ido hacia el baño. El detective V, decidió que no, que el gamusino mentía. Cogió todos los peluches y los metió debajo de la cama, haciéndome gestos de que el monstruo estaba ahí y se llevaba a los peluches. Los tuvimos que sacar a todos, pero el monstruo forcejeaba. ¡Fue duro, pero lo conseguimos! Pero el monstruo volvió al ataque así que se me ocurrió que los lleváramos al comedor para ponerlos a salvo. Y así lo hicimos, cargados con los peluches corriendo por el pasillo.
    Al llegar al comedor nos creíamos a salvo, ¡pero apareció el monstruo que nos había seguido! El detective V cogió el folio del monstruo y empezó a hacer como que volaba y gritaba "AAAArrrhhgggg". A partir de aquí él se convirtió en el director de juego.
    Estuvimos un buen rato luchando contra el monstruo y protegiendo a los detectives, hasta que el detective V me hizo señas de que el monstruo se había dormido, acurrucado en el sofá. Me di cuenta de que era hora de la merienda y a lo mejor tenía hambre. El detectivo V me dijo que sí y, cuando se despertó el monstruo, le dimos pan y chocolate y volvió a dormir.
    Simplemente tenían hambre y sueño y por eso atacaba a los peluches. Para celebrarlo hubo entrega de pegatinas al valor y a las grandes ideas, porque no tuvo miedo en ningún momento y dirigió su primera partida de rol.
    Fue increíble como el detective V asimiló el juego, la mecánica y lo que tenía que hacer. Cómo me hizo entender lo que estaba sucediendo y cómo se convirtió él (¡un pequeñajo de 3 años que no habla!) en el director del juego es algo increíble.

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    1. Muy buena narración. Probablemente una de los problemas que yo tuve fue que había dos niños mayores (8 y 6) jugando también, y quizá habría sido más recomendable jugar sólo con el niño pequeño de 3 años, o juntarle con niños de su edad.

      También tendría que haberle echado siesta. El sueño seguro que no le ayudó a meterse en la partida :D.

      Muy bonita narración. Me alegro de que lo pasaseis fenomenal :).

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    2. Hola Ana,
      Me ha encantado leer tu experiencia, no sólo porque es muy bonita, sino por que en parte me siento muy identificado. Mi peque va a cumplir cuatro años este agosto, y tampoco habla ya que desafortunadamente está diagnosticado con un Trastorno de Espectro Autista. Aún así, también es muy espabilado y observador, y aunque despacito, está haciendo enormes avances en las cuestiones sociales. Poco a poco va apareciendo una mayor comunicación y los primeros pasos hacia el habla. Una experiencia como la que cuentas, por ejemplo, aún no es posible tenerla con él, pero cada día que pasa está más cerca.

      ¡Espero que no te importe si me baso en tu experiencia cuando llegue el momento!

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    3. Hola Jordi,

      Muchas gracPor supuesto que no me importa, es más, estaré encantada de saber que tu pequeñín también aprende a combatir a sus propios monstruos. ¡Seguro que muy pronto también está dirigiendo sus propias partidas!

      ;)

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  9. Hola Carlos, hacía tiempo que no me pasaba por tu blog y he leído los comentarios de esta entrada y me he emocionado :) qué guay. Aprovecho para momento publi y decir que tenemos páginas del libro en Facebook y en Google+ y que nos haría mucha ilusión que se pusieran en contacto y nos contaran sus historias :)

    Te escribía para comentarte que dices que hay una regla que no se explica. La duda es que "un detective arroja una Red Atrapamonstruos sobre un monstruo pero falla y éste escapa. Aún así, el valor de Miedo de la aventura baja unos cuantos puntos"
    Esto está explicado en la página 16, en la sección de capturar al monstruo en el parrafo donde indica "Si no se supera la tirada".
    La "regla" dice que "El resultado de la tirada se resta al valor del miedo igualmente, porque el monstruo estará asustado."
    Esto es para que baje el valor del miedo de un monstruo que tenga mucho, así, es posible capturar a un monstruo con valor de miedo 15 aún siendo sólo 2 detectives.

    Ya siento que haya sido con tanto retraso jajaj pero bueno, releyendo el libro me acordé de la duda y no me he podido resistir a comentarla jajaja

    Un abrazo, a ver si volvemos a coincidir algún día :)

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    1. Hola, Álvaro.

      Ah, pues mira, es posible que no me diera cuenta de esa regla, lo cual tiene delito porque... tampoco hay tantas reglas en el libro :D. Vale, pues voy a editar la entrada para dejar claro que el que ha metido la gamba soy yo ;).

      Reitero mi enhorabuena por la calidad del libro. Creo que os ha quedado muy chulo y que funciona maravillosamente bien con los niños. Muy buen trabajo :).

      Seguro que coincidimos algún otro día; el mundo friki hispánico no es tan grande, y al final nos conocemos todos :D.

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