Hoy se acaba el mes de febrero, confirmando de forma empírica que de un tiempo a esta parte los meses se van cayendo sin darme cuenta; me hago mayor. Hay que admitir que como he estado bastante ocupado con el mecenazgo de M-Space, este mes ha sido un poco locura (hemos llegado a hacer cuatro entrevistas, la última de tres horas, y eso termina cansando, la verdad). Así que ahora que parece que tengo un par de minutos libres, y antes de ponerme de nuevo con proyectos de edición, me apetece hablar un poquito aquí, en mi blog personal.
Ayer por la mañana estuve hablando con mi hija mayor sobre la vida en general y el rol en particular. Tiene quince años, así que ya se puede tener conversaciones interesantes con ella. De hecho, se pueden tener desde hace un tiempo, porque siempre ha sido una persona bastante razonable y reflexiva, y hemos tenido nuestras buenas charlas cuando hemos estado comiendo juntos después de recogerla en el instituto o mientras la he estado llevando al colegio o a alguna actividad extraescolar. Ayer, entre asuntos muggles que no vienen a cuento, le hablé también de una vieja reflexión que todos los roleros con un cierto recorrido nos hemos hecho en más de una ocasión: ¿para qué me sigo comprando juegos de rol, si no necesito tener más libros?
Una característica de los juegos de rol es que, por su propia naturaleza, lo cierto es que con un par de ellos o tres, o incluso con uno solo, pero de los buenos, tienes material para estar jugando toda la vida sin riesgo de aburrirte o repetirte. Con un juego genérico como Mythras/RuneQuest, Savage Worlds o FATE puedes preparar aventuras de todo tipo de géneros durante años y años. Y años. Vale que no hay un manual totalmente genérico, en el sentido de que por ejemplo, los genéricos tipo BRP o GURPS suelen tener sistemas de combate bastante letales y peligrosos, mientras que los tipo Savage Worlds o FATE suelen ser más "peliculeros" o heroicos. Pero dentro de sus pequeñas variaciones de estilo, puedes coger uno de estos manuales y preparar campañas de ciencia ficción, fantasía, terror o superhéroes con bastante facilidad. Estoy seguro de que en el mundo hay una buena cantidad de grupos de juego que juegan siempre al mismo sistema y tienen como mucho tres o cuatro libros con los que han dirigido decenas de aventuras a lo largo de los años.
Admitamos, en cualquier caso, que nos gusta la variedad. Que somos fans del sistema porcentual pero que Ars Magica es un sistema muy distinto pero cuyo tratamiento de la magia nos fascina y que queremos tenerlo también en nuestra biblioteca. Y, ¿cómo no tener al menos alguna edición de ese clásico que es La Llamada de Cthulhu aunque solo sea a título testimonial? A nadie le puede hacer mal meter en su estantería una edición tan bonita como el Aquelarre de Nosolorol, que es una auténtica obra de arte... y burla burlando, cuando te quieres dar cuenta, tu estantería Billy de Ikea es el hogar de un par de centenares de juegos y suplementos de rol.
Y si pasas años dedicado a esta afición, aunque solo compres de cuando en cuando, esta colección de rol puede llegar a ser bastante copiosa. En mi caso, la última vez que hice recuento me salieron como cuatrocientos libros aproximadamente. Creo que incluí también librojuegos y revistas, pero incluso si no lo hubiera hecho, seguiría habiendo varios centenares de libros. Centenares
Voy a afirmar sin rubor que no me los he leído todos. Es más, en algunas ocasiones, como cuando vendí toda mi colección de libros de Mago y Vampiro, algunos libros entraron procedentes de la tienda y se marcharon hacia sus nuevos hogares sin que me los hubiera leído más allá de cogerlos y ojearlos el día que los compré y darles algún repasito al azar a un capitulillo suelto o algo que me llamase la atención. El que esté libre de este pecado, que tire la primera piedra ;).
En muchos casos, este acumular libros está motivado por un afán completista. En Reyes me compré el Liber Nobilium de Aquelarre porque me llamó la atención el tema del que hablaba (los nobles), pero también porque de Aquelarre compro casi todo lo que sale. Porque me gusta el juego, porque tengo muchísimos libros de todas las ediciones pasadas y porque en muchos casos tengo miedo de que no lo compre mientras aún esté en tiendas y después ya no lo pueda conseguir más que a precios astronómicos en tiendas que vendan productos de segunda mano. Porque es cierto que hay editoriales que hacen tiradas lo suficientemente numerosas como para que puedes tener la seguridad de poder comprar un libro concreto en el futuro con relativa facilidad, pero también hay otras que hacen tiradas pequeñas y es ahora o nunca. No es el caso de Aquelarre, en general, pero sea la tirada de 300 ejemplares o sea de 5.000, llegará un momento en el que se agotará y nunca puedes tener la seguridad de que se vaya a hacer una reedición de un libro concreto.
Así pues, ya sea por completismo o por simple afición, es bastante común que los aficionados acumulemos libros en la estantería. Hay quien no, ojo. Conozco gente que cuida su colección de rol como quien cuida un hermoso bonsai, y lo va podando de forma periódica, vendiendo los libros que no han cumplido sus expectativas o que admite que no van a ver mesa o ni siquiera van a servir como lectura de antes de dormir. En mis lloradas jornadas Ludo Ergo Sum, que espero que podamos volver a disfrutar en formato físico cuanto antes, siempre era una gozada visitar el mercadillo y pillar tesoritos de segunda mano, que venían de gente que había decidido dar una segunda vida a libros y juegos que ya no tenían sitio en su casa.
Pero el caso es que, incluso vendiendo libros de forma periódica, muchos seguimos comprando, y no es raro ver entre los roleros veteranos grandes colecciones de rol. Casi todos nos decimos a nosotros mismos, medio en serio, medio en broma, que nos leeremos todo eso cuando nos hayamos jubilado. Es decir, mantenemos todos esos libros en las estanterías porque albergamos la esperanza de que algún día, cuando tengamos más tiempo libre, liberados por fin del frenético ritmo de vida al que nos someten el trabajo y/o los estudios, los hijos y/o los amigos y los mil compromisos que nos ocupan el valioso tiempo que se nos va de entre las manos... en ese día de la liberación, entonces sí que nos pondremos a leer por fin todos nuestros libros.
A todos aquellos que piensan así, os tengo que decir que el momento de hacer las cosas no es cuando nos jubilemos, sino ahora.
No me quiero poner siniestro, de verdad que no, así que simplemente diré que si hace un par de años nos dicen que vamos a tirarnos meses y meses saliendo a la calle con mascarilla, no nos lo hubiéramos creído, en absoluto; habríamos dicho que eso eran cosas que pasaban en las películas. Pero en realidad, sí que pasan. Y aunque no es tan común que suceda algo a una escala nacional o mundial como una pandemia o una guerra, puede suceder de modo más personal: una enfermedad, un divorcio o incluso un simple cambio de trabajo que te exija centrar tu atención en otra cosa y olvidarte de tus juegos de rol. Los problemas pequeños se suelen olvidar cuando llega un problema de verdad.
Yo no me quejo, ¿eh? No me quejo. Tengo mi curro, tengo a mi familia, tengo mis proyectos roleros. Pero sé que la vida es cambio y que mi vida con 20, 30 y hasta 40 años ha ido cambiando, en algunos casos de manera más que significativa. El rol ha sido una constante en mi vida desde los catorce, y no me arrepiento: ha habido épocas en las que he jugado o leído más y otras en las que lo he hecho menos, pero nunca lo he dejado de lado por completo. Aún asi, sé que podría cambiar, y no sé cómo será mi vida ni lo que estaré haciendo cuando tenga 50, 60 o 70.
Lo que sí tengo claro es que, mientras me den las fuerzas, seguiré comprando rol, seguiré leyendo y seguiré jugando. Me mantendré en movimiento mientras pueda y haré cosas (editar rol, escribir rol, leer rol y jugar) y trataré de disfrutar de mi afición aquí y ahora, al máximo. Puede que al final nuestros planes terminen cumpliéndose y podamos leer todos los libros que hemos ido acumulando en esa soñada residencia para ancianos roleros llamada "El Último Hogar". Pero no voy a poner todas mis esperanzas en un futuro que llegará o no. El momento de hacer las cosas que te gustan es siempre ahora. Porque ni el pasado existe ya ni el futuro será como lo imaginamos. Lo único que realmente existe es el presente.
Saludetes,
Carlos
P.D.: En estos meses me he comprado libros de Ars Magica, El Anillo Único, Hardboiled y Warhammer Fantasy; en una próxima entrada os hablaré un poco de ellos, para que se os vaya el mal rollo de esta entrada xD.
Sería divertido ver qué es lo que dijo tu hija en primer lugar... XD
ResponderEliminarMi colección es relativamente pequeña porque soy bastante agarrado (no me gusta gastar en cosas que luego no voy a tocar) y apañado (Me gusta crear mis propios sistemas). En los últimos tiempos, mi colección se partió en dos cuando emigré a Gales pero es cierto que título a título mi estantería de rol va acumulando material. Eso sí, el ordenador tiene un montón de PDFs y el otro día hice una purga de material que he ido acumulando con los años simplemente porque era gratis.
Pasa igual con los juegos de mesa: hay tantos y tantas expansiones que es prácticamente imposible que se juegue a lo mismo con regularidad, ya no se desarrolla táctica, todo son primeras partidas.
Y con las series. Ahora con tanta plataforma hay una oferta que abruma. Es complicado encontrar a alguien que haya visto lo mismo que tú.
Maldición, que es bonito que haya variedad y tal pero la cultura imperante de la inmediatez y la fidelización a cualquier precio unido a un exceso de oferta hace que todo se diluya.
O algo así.
Las conversaciones con mi hija suelen ser divertidas. Sobre todo cuando me doy cuenta de que tiene más sentido común que yo (impagable el día que le dije que todas las cosas tienen un final y me respondió: "los números no").
EliminarYo suelo mirar también qué compro y qué no, pero al final, después de años y años de comprar, terminas acumulando sí o sí. Cuando me mudé a mi casa actual hace cuatro o cinco años, la cantidad de cajas y cajas de libros que hice fue demencial. En las mudanzas es cuando te das cuenta de la cantidad de cosas que puedes llegar a tener en una casa.
Los PDF yo ya ni los cuento, la verdad. No les niego la utilidad, y es maravilloso poder tener disponible casi cualquier libro, en algunos casos descatalogado hace décadas. Si me pusiera a purgar eso yo creo que necesitaría semanas de trabajo (y no me merece la pena).
Es muy cierto lo que comentas de los juegos de mesa, al final es muy difícil que llegues a dominar alguno. Yo en ese sentido me he tirado muchos años echando una partida en el curro a la hora de la comida a diversos juegos de mesa, como Bang! o Seven Wonders. Y joder, ahí sí que desarrollas estrategias. En casa es más difícil tener un juego al que le llegues a sacar todo el jugo, aunque el Aventureros al Tren ve bastante mesa (y, sorprendentemente, a mi madre se le da muy bien cuando nos echamos partidas en el pueblo en verano).
Lo de las series es muy cierto: los viejunos que nos criamos en los 80 al final tenemos unas series comunes que todos hemos visto, pero a día de hoy todo es mucho más fragmentario, puede haber gente a la que le guste mucho ver series, igual que a ti mismo, pero que vea cosas totalmente distintas.
Eso que comentas de que la oferta es abrumadora entronca con el concepto de ETEWAF: Everything That Ever Was, Available Forever. He escrito varios artículos al respecto, están disponibles bajo la etiqueta etewaf
Pues a mí no me ha dado mal rollo, todo lo contrario: coincido contigo en que si bien en la vida soy bastante Bart Simpson (¿Porqué hacer hoy lo que puedas hacer mañana) en el rol soy más tradicional y abrazo el "no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy". Y si bien es cierto que muchas veces no acompañan ni los jugadores, ni los trabajos, los hijos y hasta los ojos (que a veces se cierran de cansancio) yo particularmente me he tomado la pandemia como una crisis, una posibilidad de cambiar las cosas, y sigo reclutando a jugadores y organizando partidas lo más asiduamente posible. Y con 43.
ResponderEliminarRespecto a lo de comprar pues creo que hay muchos grises en ello. Por un lado la ilusión de comprar algo si crees que va a ver mesa me parece importante, y luego, según qué compras, haces algo más que comprar, como en los mecenazgos de compañías pequeñas. De hecho ayer mismo compré un manual en físico de una nanoeditorial aún pareciéndome algo caro por dar apoyo al proyecto, cuando con el pdf (o incluso con material gratuito) podía valerme para jugar perfectamente, pero en esta vida no todo es utilitarismo. Si las cosas que hacemos nos hacen felices pues ¿porqué dejar de hacerlas?
Me preocupaba que quizá hubiera quedado el mensaje "¡disfrutad de la vida, que la muerte está al acecho!" xD.
EliminarEso que has hecho por esa nanoeditorial, sean quienes sean, es algo muy bonito. Más gente como tú tendría que haber en el mundo :_)
Bueno, a partir de verano que le echemos mano al material veremos si el acto altruista tiene su recompensa en forma de aventura/campaña o duerme el sueño de los justos en mi estantería roja de IKEA.
EliminarUn compañero de mesa rolera que me explicó una teoría que dice que el Rol contiene 3 aficiones/hobbies: comprar rol (coleccionismo), leer rol, jugar a rol.
ResponderEliminarYo estoy disfrutando muchísimo las tres!
No le falta razón. Probablemente la vertiente de coleccionismo existe en todos los hobbies, desde el rol hasta el aeromodelismo. Uno desea tener las obras más significativas de su afición, aunque sea por poder compararla con otras o por admirar una cosa bien hecha.
EliminarInteresante (y muy adecuado) carpe diem rolero, Carlos. Y siguiendo con el símil de Pau, creo que los roleros que peinamos canas acabamos siempre entablando una dura batalla para intentar jugar tanto como leemos, y siempre la acabamos perdiendo... ;)
ResponderEliminarQué le vamos a hacer. Es como lo de que no se puede ser friki de todo pero hay que intentarlo; tampoco se puede leer todo lo que tenemos en casa, pero hay que intentarlo xD.
EliminarPor cierto, ya he dejado la entrada de nuestro blogcomplot, ¡casi se me olvida subirla!
Me temo que yo también tengo el Diógenes rolero y acumulo con avidez. No tanta como la que tenía hace años por falta de espacio y la situación que vivimos, pero aun así no paro. Lo mismo me pasa con otra clase de libros, especialmente de historia.
ResponderEliminarA la hora de la verdad, casi siempre juego a lo que yo mismo escribo, pero al menos todo lo que acumulo me sirve como base de documentación y para obtener ideas.
El sistema al que he dedicado más horas desde 2015 es Hitos, sin duda. Para mi gusto uno de los mejores genéricos que se han hecho nunca, pese a que tiene margen de mejora. Probablemente, no necesitaría ningún juego más. Pero sin todo lo que he aprendido con los otros libros, mis partidas de Hitos no serían iguales.
Rara vez me deshago de un libro, de hecho ni me lo planteo. Quizá cuando me haga muy mayor lo done todo a la biblioteca local o al archivo.
Como bien dices, al final incluso de los libros que no juegas sacas material. Mis partidas de Ars Magica siempre estuvieron llenas de cosas sacadas de mis libros de Aquelarre, por ejemplo ;).
EliminarNo he probado Hitos nunca en mesa, no sé si es buen o mal sistema. Lo que he leído me ha dado buenas sensaciones, eso sí :).
Yo creía que nunca me desharía de libros, pero al final sí que lo hice. Y no porque fueran malos libros (los había muy buenos entre mis libros de Vampiro y Mago), sino porque no eran realmente juegos por los que sintiera un apego especial. Al final tu biblioteca rolera también te define.
Yo es que pienso que coleccionar rol y jugar al rol son dos hobbies distintos.
ResponderEliminarSiendo sinceros, apenas consumo rol. Me parece más divertido trastear y teorizar sobre los sistemas, pero respeto que cada cual disfrute de sus aficiones como refiera. Sobre el resto de la entrada, estoy bastante de acuerdo.
Tengo pendiente una aventura para la Marca del Este que llevo los dos últimos años escribiendo, sacando ratos de debajo de las piedras. Ocurre a veces, que el “ahora” son pequeños fragmentos de momentos muy chiquititos. Como ese psicopáta que va recortando letras de diferentes revistas.
De momento, aún me quedan letras por cortar. Pero cuando termine de ver la luz del túnel tengo previsto reactivar el blog para contar toda la idiosincrasia que me ha llevado ese pequeño proceso creativo.
Os vais a reír cuando suba fotos de las notas que iba tomando en mi cuaderno de reportes, ahí entre camiones, teniendo cuidado con los atropellos, cuando aún trabajaba de vigilante XD.
Puede que sean hobbies distintos, ¡pero son hobbies compatibles! :D
EliminarCon muchas ganas de leer esa aventura y, te aseguro, también de leer las notas sobre su creación. A mí vislumbrar aunque sea solo un poquito del proceso creativo de otras personas es algo que me fascina. Por eso me encantan las notas del diseñador en los juegos en las que aparecen.
Yo siempre he sido de acaparar libros. En el pasado, cuando me he deshecho de alguno (y han sido muchos más veces, y muchos más libros y tebeos de los que me gustaría) ha sido por problemas de espacio en cada de mis padres.
ResponderEliminarDe mis estanterías se han nutrido las tiendas de dos amigos... corrijo, de un amigo y otro ex-amigo, cuando abrían (una de tebeos y otra de juegos de rol)
Muchas de las cosas de las que me he deshecho he terminado por volver a comprármelas (algunas de ellas en más de una ocasión)
Siempre he sido un poco desastre para estas cosas, y al final he terminado arrepintiéndome de ello.
¡¡¡Por Crom!!!, si incluso llegué a recomprar el Halmabrea.
Durante este confinamiento me he dedicado a jugar al Tetris con mis estanterías para poner un poco de orden en la casa. Al final, los cosa de 450 libros y libretos de rol, sumados a algún que otro ciento de revistas, han terminado ocupando siete baldas. De estar repartidos por tres habitaciones, han terminado todos juntos en el salón en cosa de seis metros y medio de baldas.
La verdad es que, mirado así, he de reconocer que quedé un poco decepcionado con mi colección.
De unos libros a los que hace años que no hago demasiado caso (por no hablar de las cosas que he comprado y continúo comprando en formato digital).
Como digo, un desastre.
Sí que es cierto que cuando me libré de los libros de Mundo de Tinieblas gané al menos una balda entera, pero ya está ocupada de nuevo. Ahora mismo estoy en un momento en el que empiezo a poner en alguna balda doble fondo de libros. Igual tendría que hacer como tú y reordenar un poco todo, el equivalente a desfragmentar el disco dura xD. No creo que ganase mucho espacio, pero puede que un poquito.
EliminarFlipante lo de que de tus estanterías se han nutrido las tiendas de dos amigos xD.
Y he de decir que he fallado mi tirada de Conocimiento (frikismo) y no sé lo que es el Halmabrea :O
Era un juego bastante pequeñito. Lo compré por un par de tonterías:
ResponderEliminarLos jugadores eran "aventureros profesionales" (con certificado incluido) y ofrecían la posibilidad mandarte un diskete con el programa para generar Pjs (versiones para PC, Amiga y C64)
El juego era bastante malo y bastante feo, pero no sé muy bien porqué... le tengo cariño (aunque no el suficiente como para haber aprendido a escribir el nombre bien a la primera).
https://index.rpg.net/display-entry.phtml?mainid=8738
Vale, ahora que he leído el nombre y un poquito de su historia me he acordado de que salía mencionado en alguno de los artículo de Ron Edwards sobre "Fantasy Heartbreakers".
EliminarY debería haber leído los dos comentarios siguientes antes de hacerme el pedante...
EliminarNunca dejes para mañana la partida que puedes jugar hoy.
ResponderEliminarTanto va el cántaro a la fuente que al final sube de nivel.
EliminarBlogger se traga mis comentarios?!
ResponderEliminarNo sé a qué te refieres. No tengo otros comentarios tuyos en esta entrada en "Pendientes de moderación"...
EliminarEl otro día abrí una página porno por accidente ;-) y el CSID me habrá colocado un bacteriano en el xis del ordenador... :(
EliminarNo te extrañe. Eso pasa mucho xD
Eliminar¡Escuchad, ciudadanos de la Galaxia!
ResponderEliminarCarlos de la Cruz se había preguntado: ¿para qué me sigo comprando juegos de rol, si no necesito tener más libros?
anonimous responde con cuatro palabras que mágicas son: Fear Of Missing Out
¡Salve, ciudadanos de la Galaxia! El emperador ha hablado.
Pero no sé si es exactamente eso. Porque el FOMO es más bien temer quedar aislado a menos que estés continuamente en las redes sociales o inmerso en las discusiones de tu mundillo (por el medio que sea).
EliminarPara mí eso se puede hacer sin necesidad de comprar libros; puedes participar en las discusiones que se monten y no comprar nada de las novedades. Mucha gente opina de juegos sin haberlos leído, ni mucho menos jugado ;), así que poderse se puede.
Yo la verdad es que muchos libros los compro porque entiendo que cuando pasen unos años no los podré tener en físico. Hace poco me han ofrecido dinero por varios libros de mi colección de El Anillo Único, sin ir más lejos.
¡Escuchad, ciudadanos!
EliminarCarlos de la Cruz dijo: el FOMO es más bien temer quedar aislado a menos que estés continuamente en las redes sociales
Don Justo Castañuelas dice: ¡Correcto! ¡así es!
anonimous dice: Pero la tesis de este emperador es que el FOMO precede a las redes sociales y se extiende fuera de ellas.
anonimous se pone las Barbas del profeta.
anonimous dice: En verdad, en verdad os digo que el FOMO es una hidra de ciento treinta y tres cabezas... ¡¡¡y once cuernos!!!
anonimous se quita las Barbas del profeta.
Carlos de la Cruz dijo: Yo la verdad es que muchos libros los compro porque entiendo que cuando pasen unos años no los podré tener en físico.
anonimous dice: ¿Lo veis? Esto es un ejemplo de libro de "Fear Of Missing Out". O dicho en castizo, del miedo a perder el tren.
¡Salve, ciudadanos!
Pero el caso es que, aunque no los tenga en físico, lo más probable es que los pueda tener en digital, así que entiendo que no es exactamente lo mismo. Aunque no niego que son conceptos relacionados.
EliminarSin embargo, pienso que el FOMO tiene más que ver con estar cada día en las redes sociales o acudir a cada evento cuando tiene lugar. Comprar más o menos está relacionado, pero no todo el mundo se compra las últimas novedades según salen por miedo a quedarse fuera de la conversación. O eso me parece a mí.
¡Escuchad, ciudadanos!
EliminarCarlos de la Cruz dijo: pienso que el FOMO tiene más que ver con estar cada día en las redes sociales
es.wikipedia.org dice (la negrita es mía): FOMO también se define como un miedo al arrepentimiento, que puede llevar a una preocupación compulsiva de que uno pueda perder una oportunidad de interacción social, una experiencia novedosa, una inversión rentable u otros eventos satisfactorios.
¡Salve, ciudadanos de la Galaxia! Wikipedia ha hablado.
¡Escuchad, ciudadanos!
Eliminaranonimous dice: ¡Pero bueno! ¿qué es esto? Yo he venido a hablar de mi FOMO. Y en vez de eso, me enzarzo con Carlos en una disparatada e inútil discusión semántica.
anonimous dice: Mi "fomosis" se gestó en una infausta tarde de diciembre, cuando fuí de excursión a la meca y templo de los juegos. Es decir, al Corte Inglés. Allí fue cuando tuve entre mis manos la caja del D&D Básico.
y anonimous pensó: "¡5000 ptas! ¡Qúe caro! Bueno, ya lo encontraré en cualquier jugueteria."
anonimous dice: Peró el suflé del D&D Básico en castellano se deshinchó y las cajas rojas se perdieron como lágrimas en la lluvia.
sinonimous dice: ¡Olé tus metáforas!
anonimous dice: Dicha fomosis salió la luz a raíz de otro gran suflé, el D&D edición de Borrás. En vista de que la infame Caja Negra estaba repleta de chatarra, fuí a por la Rules Cyclopaedia. ¡Que si quieres arroz catalina! La RC estaba descatalogada en todas las tiendas especializadas del mundo y el extranjero.
la fomosis de anonimous dice: Mis primeros pasitos fueron obligar al pelele de anonimous a hacerse con fotocopias de fotocopias de las fotocopias de D&D Expert, Companion, Master e Inmortales. Luego le encasqueté algunos libros del RuneQuest que nunca usó para nada. Y la cajita amarilla de Ediciones Zinco.
la fomosis de anonimous: Y cuando me hice mayor, hice que anonimous se pusiera a descargar PDFs de Megaupload, como si no hubiera un mañana. ¡Ja, ja, ja!
¡Salve, ciudadanos!
¡Escuchad, ciudadanos de la Galaxia!
ResponderEliminarCarlos de la Cruz dijo: Una característica de los juegos de rol es que, con un par de ellos o tres, tienes material para estar jugando toda la vida.
anonimous dice: No cabe duda alguna de que es así... tan cierto como que yo soy el Emperador de la Vía Láctea.
Ciudadanos de la Galaxia ¡vuestro Líder os saluda! No temáis, endebles y patéticos humanos. He venido en son de pez... de pis... ¡de paz, pardiez!
Carlos de la Cruz dijo: Con un juego genérico puedes preparar aventuras de todo tipo de genéros durante años y años.
anonimous dice: He aquí uno de los tres grandes ganchos.
sinonimous dice: ¿Ganchos? ¿a qué ganchos se refiere anonimous?
anonimous dice: Está claro ¿no? A los ganchos de que se sirven los gyga-juegos para vender chatarra a los incautos.
¡GANCHO CERO!
los gyga-juegos dicen: somos los "juegos de rol".
¡GANCHO UNO!
los gyga-juegos dicen: los PJs pueden hacer QWALKYER KOZAAA...
¡GANCHO DOS!
los gyga-juegos dicen: con el manual básico de reglas tendrás para toda la vida.
sinonimous dice: Hay que reconocer que el plan es magistral. ¡Alguien menos inteligente que nosotros podría llegar a tragárselo!
anonimous dice: ¡Ja, ja, ja! :D
sinonimous dice: ¡Ja, ja, ja! :D
Byron Maiden dice: ¡Ja, ja, ja! :D
persistent identity dice: ¡Ja, ja, ja! :D
el resto de esbirros dicen: ¡Ja, ja, jases! :DDD
el emperador en la sombra dice: ¡Muaaa, ja, ja, ja, jota! XD
¡Salve, ciudadanos de la Galaxia! El emperador ha hablado.
¡Escuchad, ciudadanos!
Eliminaranonimous dice: Mi homólogo sinonimous sugiere que aclare mi comentario anterior, para beneficio de los lectores peor dotados.
anonimous dice: Lord Byron, haced los honores.
Byron Maiden dice: ¿Quien, yooo...? Pe-pe-pero...
anonimous dice: ¡Estúpido Byron! persistent, por favor, vuestro turno.
persistent identity: Estooó... ¿de que estábamos hablando?
anonimous dice: ¡Estoy rodeado de inútiles!
sinonimous dice: Emperador, con vuestra venia, permitid que tome la palabra.
sinonimous dice: Decía nuestro emperador que los libros de reglas son como la armadura de Iron Man. Necesitan una fuente de energía, o de lo contrario... no son más que chatarra.
sinonimous dice: Aunque el rival de Tony Stark, Tío Gilito, consiguió los restos del Mark I, no le servía de nada. Tío Gilito tuvo que ir a buscar a Tony y, literalmente, arrancarle la fuente de alimentación del pecho.
sinonimous dice: (Y por favor, no hagáis caso de las puñeteras secuelas que se pasan esta restricción por el forro de los pantalones.)
sinonimous: Si nos vamos de Iron Man a la Patrulla X, esa pandilla de supermutantes vestidos de neopreno, nos encontramos al Cíclope, el tipo de las gafas de buzo que disparan rayos láser.
sinonimous: Si Tío Gilito robara las gafas del Cíclope para producirlas y venderlas en masa, los compradores se llevarían un buen chasco. Porque el poder de tirar rayos no está en las gafas sino en los genes mutantes de Cíclope. Para Cíclope las gafas son su bien más preciado porque canalizan su poder innato, para una persona normal sólo son chatarra cara.
anonimous dice: Gracias, sinonimous, déjame continuar a mi. Preparar y arbitrar partidas es un superpoder mutante. Si no has nacido con él, ningún libro te va a convertir en un Game Master.
anonimous dice: ¡No creáis lo que dice Carlos de la Cruz! Carlos es un supermutante que ha nacido para ser Master, y como tal no puede comprender las limitaciones de los salvajes.
sinonimous dice: Por otra parte, no sabrás si eres o no un mutante hasta que no lo intentes.
¡Salve, ciudadanos!