10 abril 2021

Vendha

Desde hace un tiempo he decidido dedicarle algo más de atención a mi extensa, muy extensa biblioteca de libros físicos y...

(Un inciso: hace unos años no se me había ocurrido que tuviera que añadir a "libros" el adjetivo "físicos" para distinguirlos de nada; lo normal es que los libros fueran físicos, o ya serían otra cosa. Pero desde la llegada del PDF y el eBook, parece que sí que es necesario hacer la distinción. Cómo cambia la vida, y qué pronto nos acostumbramos a la nueva normalidad).

... y esto me ha llevado a desempolvar varios tomos que acumulaban polvo en las estanterías. Normalmente me estoy leyendo estos libros cuando me voy a dormir, y casi siempre logro leer unos cuantos párrafos antes de quedarme dormido. Y si el libro es interesante, incluso varios capítulos. Confieso que en más de una ocasión he tenido que terminar de leer el libro de día porque veía que me atascaba y había que darle un empujón o justo lo contrario: que estaba tan interesante que leerlo solo por las noches se me quedaba corto.

Lo último que me he leído ha un librojuego: Vendha, escrito principalmente por Jonathan Pineda y basado en el universo ficticio creado por su padre, Pepe Pineda, para el clásico juego de tablero En Busca del Imperio Cobra. La historia de este juego daría para un artículo completo, pero baste con decir que fue publicado en los años 80 y solo fue el primero de muchos diseños creados por Pepe Pineda para la editorial CEFA. A mí me encantaba este juego, y aún tengo un original en casa, bastante destrozado el pobre, y la nueva edición que publicaron hace no mucho tiempo (con un tablero que no tenía ni la mitad del encanto del original). Aunque es cierto que las mecánicas del juego se podrían considerar muy, muy simples en el día de hoy, la combinación del uso de cartas, lo inspiradoras que eran las ilustraciones y esa mezcla muy loca de magia y tecnología que se adivinaba en la ambientación eran todo un acicate para la imaginación.

La editorial Nosolorol está publicando ahora mismo una serie de librojuegos basados en este mismo universo, obra de Pompeyo Reina, un autor tristemente fallecido antes de completar la colección, pensada originalmente para ser diez libros. No sé si al final se publicarán todos estos libros o no, pero ahora mismo podéis adquirir los cuatro primeros en un pack bastante bien de precio en la web de la editorial. Estos también los tengo y me los leeré a no mucho tardar.

Vendha no tiene que relación con los librojuegos publicados por Nosolorol, sino que es una obra independiente. Se financió a partir de una campaña de verkami algo accidentada. En primer lugar, porque nos pilló la pandemia de por medio, pero también porque a mitad de campaña los autores decidieron no publicar con la editorial que lo iba a sacar en primer lugar porque no estaban satisfechos con la calidad de la obra y, aún teniendo los libros impresos, los volvieron a revisar e imprimir. Teniendo un poco de experiencia ya en este mundillo de la impresión, os digo que esta decisión ha tenido que ser dolorosa (y bastante cara), aunque no sé más sobre las circunstancias que lo que informaron en el mecenazgo.

De un modo u otro, al fin los libros se reimprimieron y nos llegaron a los mecenas. Tenía curiosidad por ver la versión de Jonathan Pineda sobre el mundo creado por su padre. En el propio mecenazgo se decía que la trama está basada en lo que "su autor, Pepe Pineda, partiendo de la idea original del diseño del juego, novelizó años atrás, a través de una serie de partidas junto a sus amistades más cercanas. Durante estas partidas Pepe Pineda creó un universo exclusivo lleno de aventuras, personajes, lugares y una trama inédita nunca vista en el propio juego de mesa creado previamente.". A mí me suena a partida de rol, la verdad :D.

¿Y cómo es, después de esta larguísima introducción, el libro? Personalmente, me ha decepcionado un poco, porque probablemente esperaba más. En primer lugar, dentro del mundillo de los librojuegos existen aquellos que incluyen un pequeño sistema de reglas en los que hay que usar dados, hacer una ficha de personaje, etc. (como en los libros de Lobo Solitario o La Búsqueda del Grial), mientras que hay otros en los solo tienes que ir tomando decisiones en ciertos momentos, pero no hay que tirar ningún dado (como en los clásicos Elige tu propia aventura o La Máquina del Tiempo). Confieso que soy más fan de los primeros que de los segundos, y que Vendha es un librojuego clásico del segundo tipo. Sí es verdad que en algunos momentos el protagonista consigue ciertos objetos que te permiten más opciones en un momento dado (conseguí escapar del Pozo de los Condenados en mi primera partida gracias a cierto objeto que encontré en mi aventura, por ejemplo). De todas formas, esto no es algo que nos hubieran ocultado a los mecenas, era bien sabido; simplemente, en este sentido, prefiero otro tipo de librojuegos.

Hay algo que sí que llevo peor: normalmente en los librojuegos se utiliza la segunda persona en la narración, como si estuvieran hablando al lector ("te encuentras con una puerta cerrada al final del pasillo"), pero hay un par de párrafos en los que la narración pasa a primera persona ("decido usar la llave que encontré antes para abrir la puerta"). Puede que inicialmente el texto estuviera escrito en primera persona y después se cambiara a segunda, pero esto habría que haberlo detectado en la corrección, porque sucede al menos en un par de ocasiones en el texto.

En cuanto a las ilustraciones, no están mal, pero son las típicas ilustraciones hechas a color que después se pasan a escalas de grises y de nuevo es algo que no me gusta mucho; prefiero para un libro en blanco y negro las ilustraciones pensadas directamente para estar en blanco y negro (esto es algo que sucede también en Aventuras en la Marca del Este y creo que es una lástima que se pague la ilustración a color para después no aprovecharlo).

Sobre las decisiones a tomar en el libro, hay algunas que son muy obvias que van a resultar en la muerte del personaje, y creo que habría agradecido poder tomar más decisiones: hay veces en que una decisión te lleva en un largo arco narrativo en el que pasan muchas cosas sin que tengas que volver a decidir nada. Yo prefiero párrafos más cortos y darle más peso a la parte de juego que a la de narración. Y el enfrentamiento final con el Emperador Cobra es demasiado sencillo. Hubiera agradecido poder tomar más decisiones en ese punto que añadieran algo de dificultad.

En lo que sí he de decir que estoy satisfecho es en la historia general. No es un librojuego complicado de completar (yo me lo pasé a la primera), pero sí que hay esa mezcla de magia y tecnología que se podía adivinar en el juego de tablero, y la estructura del libro sigue la de una partida en el sentido de vencer a una serie de enemigos con la ayuda de los dioses para ganar acceso a la Isla Cobra y vencer al emperador. En ese sentido, sí que se siente como una versión plausible del original. Y es que es cierto que en el tablero del juego, todos teníamos claro que Vendha era una región desértica en la que había un gran dinosaurio y una Ciudad de Plata, pero eso era todo. La imaginación de cada uno era la que se encargaba de rellenar los huecos y pensar en qué aventuras correrían nuestros héroes en esos lugares y enfrentados a esos monstruos. Pineda nos da una versión de Vendha en la que nos encontramos no solo con hombres cobra que usan la tecnología y la magia sino con hombres cobra que no sirven al emperador, hechiceras malvadas y muy peligrosas, al capitán del Nautilus, a lo que no puede calificarse sino como un pistolero del oeste y, en definitiva, una mezcla bastante loca de lo fantástico y lo mágico. Y también toda una trama subyacente que habla de que el Imperio Cobra se extiende por distintas épocas y dimensiones, de modo que en futuros libros podrá haber otros protagonistas que venzan al Imperio en sus propios mundos; eso me ha parecido un recurso bastante inteligente.

Lo que sigo sin entender es por qué el protagonista es un hombre simio. Que no es que me parezca mal, pero yo hubiera esperado algo así en el libro dedicado al continente/mundo selvático. Pero bueno, elecciones del autor.

A mí no me gusta mucho hacer reseñas negativas, os lo confieso ;), pero no estoy muy impresionado con el libro. Entiendo que es una primera obra y que los autores se han encontrado dificultades importantes por el camino, pero si no estuviera relacionado con el autor original y nos mostrara un poco de su idea de la ambientación del juego, no pasaría de ser un librojuego simplemente correcto. Y os aseguro que me jode escribir esto; pero es que la nostalgia no es suficiente para sostener una obra, sino que hay que valorarla por lo que es, objetivamente. En cualquier caso, es posible que con todo lo aprendido, en futuras libros los Pineda tengan más experiencia con lo que supone una campaña de verkami y lo que supone escribir un libro de este tipo, y la cosa sea aún mejor. Yo creo que tiene potencial para mejorar en futuras entregas :).

Saludetes,
Carlos

10 comentarios:

  1. Muy curioso. En realidad, las novelas interactivas con tiradas de dados siempre acabo leyéndolas sin tiradas de dados, porque desde la cama da un poco de pereza.
    Por otro lado, una partida de rol ambientada en el universo de El imperio cobra podría estar guai.

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    1. Ah, pues yo sí que hago tiradas en los librojuegos. Sí es cierto que en la cama no xD

      Estoy de acuerdo en que El Imperio Cobra da para juego de rol guapo, guapo.

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    2. Yo también era de los que tiraba los dados. Aunque había algunos que eran imposibles de pasar "sin hacer trampas". La Mansión Infernal me costó horrores, llegabas hecho polvo al monstruo final que era una pasada.

      Muchos de ellos no se necesitaban dados físicos y el propio libro los incluía, ya sea en forma de tabla o abriéndolo al azar. Yo usaba esos sistemas creo que más que los dados físicos.

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    3. La tabla que sustituía a los dados la recuerdo en los libros de Lobo Solitario, por ejemplo, aunque como la mayoría de estos libros usaban un dado de seis caras, no solía ser problema encontrar alguno por la casa. Ahora que lo pienso, creo que Lobo Solitario usaba un dado de diez caras, a lo mejor es por eso que tenía la tabla impresa en cada libro.

      La Mansión Infernal es un libro que no tengo, y es una pena, porque dicen que es un clásico. Entendámonos... un clásico dentro del género ;).

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  2. Con lo “cándido” que sueles ser en las reseñas, me ha quedado claro leyendo entre líneas que el libro tiene que ser un horror XD

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  3. El dibujo del Gran Dinosaurio está copiado casi con total seguridad del tiranosaurio del libro de Vida Íntima de los Animales de la Prehistoria. Y creo que en Umbría alguien mencionó de usar el Imperio Cabra (así lo llamaba mi abuelo) como ambientación para PbtA...

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    1. ¿Pero dices el Gran Dinosaurio del tablero de juego, no?

      El Imperio Cobra sería una buena ambientación para PbtA. O para casi cualquier juego. Es una mezcla muy loca de muchas cosas, con mucho potencial. Gran parte del encanto de este juego viene de lo inspiradoras que eran sus ilustraciones y de lo loca que era la mezcla.

      El Imperio Cabra también tiene potencial.

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  4. En la reimpresión hubo un rollo muy chungo. Yo iba a comprarlo pero al final decidí no hacerlo por todo eso. De hecho, incluso acabaron creando un change.org para pedir que se tuviera en cuenta a los autores:

    https://www.change.org/p/cefa-toys-imperio-cobra-no-sin-los-autores

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    1. Sí, me enteré del tema. Creo, de hecho, que en labsk.net hicieron un análisis de la reimpresión y era un poco una vergüenza. La verdad es que mi juego original está hecho una mierda, pero aún así, lo sigo prefiriendo; el tablero clásico es que no tiene ni punto de comparación con el nuevo.

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