20 julio 2024

Reseña de La Torre de Wayreth

En el año 2022 me estuve leyendo las aventuras originales de la Dragonlance y, poco después, me volví a releer varias de las novelas. En algunos casos, no fue una relectura, sino una lectura nueva, porque aunque me leí las tres novelas originales de Crónicas de la Dragonlance y las tres de Leyendas de la Dragonlance, los novelas principales posteriores, con los caballeros de Takhisis, la guerra contra Caos, los caballeros de Neraka y el Único, la Guerra de los Espíritus, etc., no me los había leído. Al final lo hice y aunque me gustó el desarrollo, no me gustó demasiado el final.

Después de toda esta lectura, tengo dos opiniones fuertes sobre las aventuras y sobre las novelas. En el caso de las aventuras, creo que siguen siendo buenas aventuras, mucho menos dirigistas de lo que se piensa, y con la posibilidad de crear tu versión alternativa de la Guerra de la Lanza, en la que los personajes protagonistas terminen siendo distintos a los del grupo que protagoniza las novelas. Existe la posibilidad de que mueran algunos de ellos y sean sustituidos por otros personajes que aparezcan después (algunos de ellos, secundarios en las novelas) e incluso puede que Berem, el Hombre de la Joya Verde, no sea determinante para vencer a Takhisis al final.

Creo que una de las mejores sugerencias que he leído al respecto la mencionaba ya en mis comentarios finales sobre las aventuras: que sería muy chulo usar el suplementos Dragons of War, que es un wargame sencillo, para simular la Guerra de la Lanza y utilizar las aventuras como localizaciones en las que conseguir mejoras para esa guerra (por ejemplo, que los dragones del bien se unan a la guerra una vez se descubra la verdad sobre los draconianos en la aventura descrita en Dragons of Deceit). No es una idea mía, pero me parece muy buena.

Y, si quieres seguir jugando en el mundo de Krynn, la verdad es que se puede hacer simplemente asumiendo que incluso después de que se le cierre el paso a Takhisis al mundo, sigue habiendo ejércitos de Señores de los Dragones por el continente de Ansalom y que se puede seguir jugando la eterna pugna entre el bien y el mal sin necesidad de traer megadragones colosales, hacer desaparecer de nuevo a los dioses o demás zarandajas. El mundo es interesante como un lugar post-apocalíptico en el que hay guerra pero también esperanza, una vez los dioses y los dragones benignos han regresado.

Y en cuanto a las novelas... sé que hay más de doscientas, pero si te lees simplemente las seis que forman Crónicas y Leyendas, tienes más que suficiente, y un final adecuado y satisfactorio para la saga.

Curiosamente, hay una serie de novelas que pueden ser también interesantes de leer, y que se agruparon en una mini-colección de (sí, otra vez) tres libros, llamada Las Crónicas Perdidas. Los libros son El Mazo de Kharas, El Orbe de los Dragones y La Torre de Wayreth. Cada uno de ellos está ambientado en la misma época que los libros originales (esto es, las Crónicas) y retoma a los protagonistas originales: Sturm, Raistlin, Flint, etc. Lo que describen son momentos que muchas veces aparecieron en las aventuras, pero no en las novelas, donde se los ignoró por completo o se mencionaron de pasada.

El Mazo de Kharas, por ejemplo, trata sobre la exploración del reino enano de Thorbardin y sus alrededores que tiene lugar en las aventuras Dragons of Hope y Dragons of Desolation, que directamente se saltan por completo en las novelas, mencionándose únicamente como si hubieran tenido lugar, pero poco más. En el caso de El Orbe de los Dragones, trata principalmente sobre Dragons of Ice cuya trama completa se resume en un poema en una de las novelas.

En el caso de La Torre de Wayreth, no hay una aventura que los autores se dejaran por novelar. En lugar de eso, es una narración centrada casi por completo en el hechicero Raistlin, es decir, el personaje más popular, con muchísima diferencia, de toda la saga ;). Raistlin desaparece en un momento de la tercera novela y reaparece al final, más poderoso que nunca. ¿Cómo llega a serlo? No se sabe con seguridad. Y la explicación está en esta novela, que trata todo lo que le sucede desde que se separa del grupo hasta que los salva, en los túneles bajo la ciudad de Neraka.

El libro me ha gustado bastante, centrado como está en un personaje que, ciertamente, tiene carisma. También es un poco llorón, todo sea dicho, pero es un personaje complejo e inteligente. A lo largo de la novela se ve cómo sobrevive a su viaje hasta Palanthas usando el Orbe de los Dragones, como recupera parte de su salud, cómo viaja a Neraka y entra al servicio de los Señores de los Dragones y hasta cómo salva a los dioses de la magia. En casi el último momento se explica incluso cómo sube diez o doce niveles y se convierte en un mago mucho más poderoso de lo que es al principio de la narración :D. Spoiler: es porque absorbe parcialmente la esencia de Fistandantilus, el espíritu de un hechicero que lo ha atormentado desde su Prueba.

Creo que lo que más me gusta de la novela es que es dinámica y tiene algunos personajes carismáticos, aparte del protagonista (como la hechicera oscura Iolanthe, que se convierte en la principal aliada de Raistlin en Neraka). El final lo conoces, porque es el mismo que aparece en La Reina de la Oscuridad, pero desde el punto de vista de Raistlin. Y es justo en ese final donde está la parte que menos me ha gustado de la novela.

Porque veréis, en ese punto, Raistlin salva a su hermano y sus amigos poniéndose a lanzar hechizos como una mala bestia, matando a todo quisqui (soldados humanos, goblin o draconianos) que se le ponen por delante. En un momento dado, incluso, aparecen un montón de hechiceros Túnica Negra (hechiceros malvados, como él) y simplemente se dan cuenta de que es un maestro de la magia, lo saludan y se marchan. Y eso, que ya lo conocíamos desde La Reina de la Oscuridad, me había llevado a creer que este libro iba a tratar de cómo Raistlin llegaba a la ciudad de Neraka, se integraba en los ejércitos de los dragones y estudiaba con los hechiceros malvados que servían a Takhisis.

Pero resulta que no. Que cuando Raistlin llega a Neraka solo se encuentra a Iolanthe y a tres hechiceros seniles que no sirven para nada. El resto de hechiceros oscuros se marcharon hace tiempo porque Takhisis dejó de confiar en los dioses de la magia. Yo diría que esta es una forma de meter la trama de la lucha contra los dioses de la magia, algo de las intrigas de Raistlin con el Cónclave de hechiceros de la Torre de Wayreth (que, aunque da título al libro en español, en realidad sale bastante poco) y, bueno, yo diría incluso de no liarse con temas de cómo es aceptado Raistlin con el resto de hechiceros malvados. No lo sé. Admito que, aún así, el relato está bien y es interesante, pero esperaba otra cosa. Leyendo otras reseñas he visto que no soy el único de quejarse de esto, porque es que esos hechiceros oscuros que salen al final aparecen literalmente de la nada; no hay más que unas referencias muy ligeras a que algunos hechiceros malvados se quedaron con Takhisis haciendo misiones especiales.

En cualquier caso, el libro está bien, y creo que no es una mala versión de lo que le sucede al hechicero en esos meses perdidos que pasan desde su desaparición en el tercer libro de Crónicas. No me he leído los otros libros de Las Crónicas Perdidas, pero creo que me los voy a dar en paso. Hay muchas otras cosas que quiero leer y me parece que estos dos años metido en la Dragonlance han sido suficientes.

Si acaso, me podría gustar leer Towers of High Sorcery, un suplemento para D&D3 que describe las Torres de la Alta Hechicería de Krynn, donde los magos de las tres órdenes (Blanca, Roja y Negra) colaboran para mejorar en el estudio de la magia. De todas las ideas buenas que tiene Dragonlance, la de esta especie de terreno neutral para magos creo que es de las mejores. No sé si tremendamente original (mezclar torres y magos está a la orden del día), pero sí bien desarrollado. Todas las escenas de los distintos libros ambientadas en las distintas Torres de la Alta Hechicería siempre me gustaron mucho.

Está visto que al final la Dragonlance me termina atrayendo de un modo u otro. Tendré que hablar con mi psicóloga xD.

Saludetes,
Carlos

2 comentarios:

  1. A mi me encantaron los Cuentos de la Dragonlance. Esa mezcla de historias cotidianas y diferentes puntos de vista me llegó a la patata. Pienso que ahí está el encanto de la ambientación, en contar historias pequeñas y ese momento , al final de la guerra de la lanza está muy guay para esto.
    Tengo una aventura que se titula Con el rabo entre las piernas que jugamos no hace mucho. Trata de un grupo de draconianos huyendo de un grupo de caballeros de Solamnia. Fue divertida.

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    1. Los Cuentos no los conozco, la verdad. He tenido que buscar lo que son. Y sí, suenan interesantes. Como ya he dicho, al final creo que ya he cumplido con mi cupo de Dragonlance por un tiempo pero, ¡nunca se sabe cuándo me volverá a picar el gusanillo! ;).

      Lo de los draconianos es interesante. Lo cierto es que es una raza curiosa. Cuando me leí los Apéndices de las Crónicas me pareció muy curioso el interrogatorio que le hacen a uno de ellos, y su visión de la vida.

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