20 marzo 2022

Juegos de rol en solitario

Hay una tendencia en el mundo del frikismo que me ha llamado la atención, porque la veo cada vez más presente, y es la de los juegos de rol en solitario. La característica fundamental de este tipo de juegos es que se trata de una actividad pensada para un solo jugador, que utiliza la mecánica del juego como sustituto del director de juego. Me da la impresión de que la línea divisoria entre director de juego y jugador se desdibuja, pero no he leído (ni jugado) los suficientes juegos de este tipo como para tener una idea clara. Por el momento, lo dejo en una intuición ;).

Antes de la actual eclosión de este tipo de juegos ya existían obras como Mythic, publicado en 2006. Mythic incluía herramientas para simular la labor de un director de juego, normalmente a través de tiradas en diversas tablas que permitían interpretar las acciones de los personajes jugadores. El juego incorporaba su propio sistema, pero se dejaba claro que podía utilizarse como soporte para otros juegos de rol. Sin embargo, aunque tanto este como otros sistemas eran conocidos por la afición, no ha sido hasta hace apenas unos meses que el concepto se ha popularizado y que han surgido multitud de juegos específicamente pensados para ser jugados en solitario, en lugar de ser una opción o una herramienta para otros juegos.

La aparición (o popularización) de este tipo de juegos coincide con un resurgimiento de los librojuegos, tanto con la reedición de viejos clásicos revisados como con la mucho más importante creación de nuevas obras maestras. A este último respecto, os animo a que os hagáis con tres obras excepcionales a través de la campaña de mecenazgo aún activa del libro Ulrica. Pillad los tres libros, no os arrepentiréis ;).

¿Es casual que librojuegos y juegos de rol en solitario se pongan de moda a la vez? Puede serlo, no soy sociólogo ;), pero me da la impresión de que podría haber una cierta conexión. Quizá tenga algo que ver con el confinamiento mundial al que nos sometió la pandemia de coronavirus en 2020, y las restricciones al movimiento y a las reuniones en grupo que llevamos aguantando desde entonces. Es innegable que estas restricciones fueron uno de los impulsores del auge de las partidas de rol online, que se han convertido en el modo preferido de jugar de muchos aficionados. Y puede que también haya supuesto un impulso para aquellos que, sin querer renunciar a su afición por los mundos imaginarios, la fantasía y la ciencia ficción, hayan preferido optar por librojuegos y juegos de rol en solitario. Seguir jugando al rol y explorando mundos fantásticos, pero sin un grupo de juego.

Recientemente me compré en el Generación X de Puebla el juego Mapeando las Catacumbas, publicado por El Refugio de Ryhope. La premisa es que un grupo de aventureros exploran unos subterráneos en los que van encontrando cosas horribles y tesoros ocultos. Con un poco de suerte, el grupo completo logrará volver a la superficie con vida. Si tienen mucha suerte, en lugar de solo un poquito, volverán también con riquezas. Este es un planteamiento más que habitual en los juegos de rol, pero al tratarse de un juego de rol en solitario, los subterráneos se van creando de modo procedimental y el jugador controla a todo el grupo de aventureros. No hay director de juego ni aventura prefijada, sino que todo se va creando al vuelo usando el sistema contenido en el libro.

No puedo evitar ver una relación con los videojuegos «roguelike» en los que cada partida es distinta debido a que las pantallas o desafíos a los que se enfrenta el jugador se crean de forma automática. Otra característica habitual en este tipo de juegos es que normalmente no puedes salvar la partida más que una vez, de modo que puedes pararla y seguir con tu vida, pero no tienes la posibilidad de volver a múltiples partidas grabadas, por si cometes un fallo en algún punto. Se juega sin red. Esta característica no la veo tan presente en los juegos de rol en solitario, pero la de la creación procedimental sí que me parece un nexo importante en común.

En muchos de estos juegos hay una inclinación evidente hacia el lado más «literario» de la afición. El propio The Wretched se define como un «journaling game», es decir, un juego basado en escribir un diario. En ese sentido se podría considerar que este tipo de juegos están más orientados a la escritura creativa que al juego de rol, pero también existen juegos como Ironsworn con un enfoque mucho más tradicional, pero con la particularidad de que el modo de juego en solitario está integrado perfectamente en el sistema.

Si queréis juzgar por vosotros mismos, en la web itch.io, hay una enorme cantidad de este tipo de variantes del rol en solitario. itch.io se está convirtiendo poco a poco en un repositorio inmenso de juegos de todo tipo, incluyendo juegos de rol y si el interfaz fuera un poco más amigable probablemente sería aún más popular ;). Debido a que cada cierto tiempo se ofertan recopilatorios («bundles») solidarios pensados para financiar diversas iniciativas (hay ahora mismo uno pensado para apoyar a las ONG que están ayudando en Ucrania), no es difícil hacerse con numerosos juegos para ir probando el concepto. Yo estoy empezando a leerme algunos y entiendo que en los próximos meses echaré algunas partidas. Os iré contando qué me voy encontrando, aunque me llama la atención que existen incluso «familias» de este tipo de juegos. Es decir, algunos juegos se hacen populares y generan a su vez variantes publicadas por otros autores. Por ejemplo, The Wretched, de Chris Bissette, ha sido la semilla de otros muchos juegos, sobre todo después de la publicación de un SRD («System Reference Document» o documento de referencia de sistema) que se puede utilizar como base para tu propia creación.

Nos queda por supuesto un debate abierto: ¿se puede considerar esta actividad como un juego de rol? Algún aficionado me ha comentado que si le quitas la componente social al juego de rol, es difícil mantener la esencia del mismo. Es decir, que se necesitan al menos dos personas para jugar al rol. Tengo que darle una vuelta aún al asunto y, sobre todo, leer (¡y jugar!) este tipo de obras. Pero considero que si existen wargames para un jugador y que los videojuegos, antes del nacimiento de internet, ya eran sobre todo experiencias en solitario, no tengo tan claro que podamos descartar de buenas a primeras que pueda existir el concepto de juego de rol en solitario. ¿No se interpreta también un rol jugando a ellos? ¿No consiste el juego de rol esencialmente en actuar como si fueras otra persona?

Ahora mismo hay un par de recursos en la red que os pueden resultar interesantes. Aparte de la web itch.io que os he comentado antes, Félix Ríos tiene una muy interesante lista de correo llamada 7 días de rol que envía cada semana y en la que suele enlazar juegos de rol en solitario. También tenéis la página Mazmorreo en solitario que trata no solo de juegos de rol en solitario sino también de juegos de mesa o wargames con esta modalidad.

Estoy muy interesado en leer lo que opináis al respecto. También acepto recomendaciones ;).

Saludetes,
Carlos