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07 agosto 2024

Reseña de El Destructor de Estrellas

Hace unos años me leí El destructor de mundos, una novela de ciencia ficción escrita por Juan Carlos Herreros Lucas, y ambientada en la galaxia descrita en el juego de rol Exo, uno de los más veteranos publicados por Ediciones Sombra.

El Destructor de estrellas no es estrictamente una continuación de la historia del primer libro, aunque vuelven a aparecer algunos personajes de la anterior novela. Está ambientada unos años después y de nuevo el desencadenante de la historia es Marlo, apodado el Destructor de Mundos, y sus protegidas, tres niñas con poderes psíquicos, que ya son tres mujeres jóvenes en esta novela.

La historia comienza cuando Marlo descubre que alguien ha intentado secuestrar a las tres chicas y se pone en movimiento para impedirlo. No es el único, y en la novela se describen también a un equipo de soldados y jóvenes psíquicos de la RFP (una sociedad bastante militarista) y un grupo de chatarreros espaciales del Sector Libertad (una sociedad anarquista). Las peripecias de unos y otros les irán reuniendo poco a poco hasta llegar al desenlace final.

La novela la publica en esta ocasión Suseya (aquí está la ficha de libro en la web de la editorial) y aunque no he encontrado erratas dignas de mención, de nuevo creo que la narración se beneficiaría de una pasada más de un corrector de estilo. Hay un par de repeticiones de palabras en el texto o frases un poco extrañas que se habrían solucionado con una revisión algo más exhaustiva.

En esta ocasión me da la impresión de que la historia es un poco menos redonda que en la primera novela. Es cierto que los escenarios son más variados, porque no transcurren en un único planeta, y que mientras que la primera novela era en gran parte una novela policial con toques de ciencia-ficción militar, en esta ocasión me da la impresión de que es más una historia de aventuras, con múltiples planetas que sirven de escenario a los protagonistas, y un toque militar reservado a las partes finales.

Lamento decir que hay algunos personajes que se quedan un poco desdibujados, como por ejemplo Doil, el chatarrero novato, que para mí es el personaje menos interesante de su grupo, y que no evoluciona demasiado ni tiene una gran importancia en la trama (en mi opinión). Por otro lado, aunque hay un par de odios enconados entre varios de los protagonistas, me da la impresión de que al final todos terminan colaborando demasiado a la hora de enfrentarse al enemigo común que, he de decirlo, no me llega a resultar demasiado aterrador; me gustó más la sensación de amenaza que desprendían los militares de la RFP en El Destructor de Mundos.

En la parte positiva, creo que las escenas de acción en las que hay involucrados soldados y militares siguen siendo de lo mejor del autor. O puede ser que me guste en lo personal la ciencia-ficción militar y por eso disfrute en lo personal de esas partes ;). También me ha gustado conocer un poco más el modo de vida de los anarquistas del Sector Libertad en cuyos planetas transcurre la mayor parte de la acción. Ellos no se llaman a sí mismos anarquistas, pero es que hasta su bandera es roja y negra ;), y aunque se ve en muchos casos la debilidad de esa forma de organización social, también hay destellos de cómo podría llegar a ser una sociedad funcional.

No es una novela muy extensa, y se lee con fluidez. Creo que la disfrutarán especialmente los aficionados al juego que quieran ver su universo plasmado en una narración. A mí me dan ganas de sacar de nuevo los libros de Exo cada vez que termino de leer una de las novelas de Juan Carlos, lo cual creo que es una buena estrategia comercial, sea o no intencionada :).

Saludetes,
Carlos

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