Magister,
La nueva Compañía Gris ha finalizado su primera misión con éxito. La Hija de Pavis, Bendrath, les envió a las ruinas del Barrio Humano más cercanas a la Explanada del Diablo, para investigar los recientes ataques de los Trolls.
A instancias del Sacerdote Bendrath, el Orlanthi Baranwolf el Rojo había sido elegido líder provisional. Cuando llegaron a la zona que debían investigar, Baranwolf identificó las marcas de la Familia Por, y los miembros de la Compañía establecieron contacto con uno de sus cazadores jefe, Nama Por. Baranwolf consiguió convencer al humano de que la Compañía Gris había sido refundada y que volvía a ser el brazo armado del Culto de Pavis. Creo que será de su interés saber que Nama Por expresó su descontento por la tardanza del Culto de Pavis en enviar ayuda.
En uno de los refugios de los Por, la Compañía se entrevistó con los ancianos de la Familia. Estos les hablaron de los ataques de los Trolls, y de cómo éstos habían encontrado algunos refugios y habían matado a todos sus ocupantes. El Chamán de la Compañía Gris, Bristo Akan, fue determinante para ganarse la confianza de los Por, gracias a sus hazañas en la lucha contra los Trolls.
La Compañía Gris diseñó un plan para tratar de atraer a unos Trolls y seguirles hasta su refugio. Junto con Nama Por y otros cazadores, dejaron una casa de los Por abandonada, y huellas más o menos creíbles que llegaban hasta ella. Después, esperaron hasta la caída de la noche.
En ese momento, llegó un cazador desde la casa central de los Por, diciendo que un nuevo grupo llamado los Nuevos Colmillos habían vencido a una partida de Trolls, y que podían acabar con ellos. Mi informe sobre los Nuevos Colmillas le llegará pronto.
Algunos cazadores decidieron volver, incluyendo a Nama Por, pero la Compañía Gris siguió con el plan. Por la noche, un grupo de Trolls cayeron en la trampa.
La Compañía tendió una emboscada a los Trolls. El Acólito de Pavis, Ketil-Yend, demostró su dominio de la Hechicería destruyendo el Manto de Oscuridad de los Trolls y exponiéndoles a su magia. El Sabio de la Espada, Hendrick Derekson, venció a un Troll Negro en combate singular, de un solo mandoble de su temible espada a dos manos. El Templario Varmand Brenson acabó con otro Troll Negro, y Baranwolf y Ris Nogweh terminaron con el líder. La Compañía luchó bien en su primer combate, con Akan y Pulos apoyando a los guerreros con su magia. Dejaron escapar a uno de los Trolls Negros y le siguieron en la oscuridad. Merced a la magia de Ketil-Yend (algún Conjuro de visión extendida), consiguieron determinar dónde estaba el fuerte, al sur del territorio de los Por.
Con esta información, volvieron hasta la sede de los Por, y allí se encontraron con que los Nuevos Colmillos habían impresionado favorablemente a los ancianos y a muchos jóvenes. Un miembro de los Nuevos Colmillos, Anareth, dijo que su líder Barden libraría esta zona de la Gran Ruina de Trolls. La Compañía Gris dijo que ellos habían matado a los Trolls y descubierto su guarida. Hubo unas cuantas muestras de bravuconería entre ellos y al fin Anareth dijo que los Nuevos Colmillos asaltarían la fortaleza Troll, con la ayuda de la Compañía Gris o sin ella.
Dos días después, sesenta Nuevos Colmillos, la Compañía Gris y una docena de cazadores Por se presentaron frente al fuerte de los Trolls. El líder de los Nuevos Colmillos, Barden, estaba allí, un hombre enorme con el cuerpo cubierto por pintura de guerra y un collar de colmillos de Troll.
Los Nuevos Colmillos asaltaron directamente el fuerte Troll, derribando la puerta principal. La Compañía Gris fué más astuta; encontraron una puerta secundaria y entraron por detrás junto a los cazadores Por, al mismo tiempo que tenía lugar el asalto principal. Pero al parecer los Trolls habían previsto este ataque, y derribaron dicha entrada con piedras, hiriendo a Bristo Akan en el proceso. Parte de la Compañía quedó atrapada en el interior del fuerte, y Bristo Akan y Ketil-Yend Pulos se quedaron fuera junto a la mayoría de los Por.
En el interior del fuerte, los guerreros de la Compañía Gris se enfrentaron a unos cuantos Trolls. El Sabio de la Espada acabó con un Troll Negro, y Ris Nogweh con muchos Trollkin. Una Sombra casi les vence, pero Varmand Brenson invocó la magia de Yelmalio y se convirtió en un foco de Luz Solar. Después, en un combate épico, Varmand Brenson y Ris Nogweh mataron a un Señor de la Muerte de Zorak Zoran, el Dios Troll de los Berserkers. Pero esto no es lo más increíble, sino que Baranwolf el Rojo, ¡asesinó a una de las hijas de la Reina Aziok de los Afengeng con una jabalina! Nuestros espías creen que era la joven Aeeyta; la Reina Troll está furiosa.
Ketil-Yend y Bristo Akan consiguieron acabar con tres Trolls Negros que les atacaron, según ha averiguado nuestro contacto entre los Por. Los dos magos utilizaron Salamandras, Gnomos y Fantasmas para lograr su objetivo, además de sus conjuros. Aunque recomiendo que se continúe la vigilancia sobre Ketil-Yend, no estaría de más aumentar la de Bristo Akan, que ha demostrado ser un hombre de grandes recursos.
El asalto de los Nuevos Colmillos había sido un fracaso. Los Trolls les estaban esperando y cayeron en una emboscada. Muchos Trolls murieron, pero hicieron huir a los Nuevos Colmillos y les persiguieron. La Compañía Gris y los cazadores Por que habían sobrevivido siguieron a su vez a los Trolls a través de las ruinas. Por el camino remataron a un Troll Negro.
Al fin llegaron hasta la guarida principal de los Nuevos Colmillos, una de las antiguas torres de defensa del Colegio de Magia de Pavis. Los Trolls estaban sitiando a los pocos Nuevos Colmillos supervivientes, luchando en la puerta de la muralla que rodeaba la torre. Los Nuevos Colmillos demostraron el uso de magia Caótica (el Vómito de Ácido de los servidores del Cacodemonio) lo cual confirmó las sospechas del Berserker, Ris Nogweh.
Los miembros de los Nuevos Colmillos se refugiaron en la torre, y cuatro Trolls quedaron fuera. La Compañía Gris les atacó, pero los Trolls se rindieron, y les dijeron que los Nuevos Colmillos eran Ogros, humanos seducidos por el Caos. La Compañía Gris decidió unirse a los Trolls para acabar con los Ogros, pero eso les enemistó con los cazadores Por, que no querían tener nada que ver con los Trolls.
Los cuatro Trolls y la Compañía derribaron las puertas de la muralla. Seis miembros de los Nuevos Colmillos salieron a luchar contra ellos, incluyendo a Anareth, al que ya conocían. Dos Trolls murieron en la lucha, pero los Nuevos Colmillos fueron masacrados por la Compañía.
Mientras la Compañía Gris registraba la torre, el líder de los Nuevos Colmillos escapó por el lado opuesto a la puerta. En la torre Ris Nogweh destrozó una Runa del Caos pintada con sangre. Suponemos que los cadáveres de los Nuevos Colmillos tendrían la marca escondida del Cacodemonio, pero no hemos podido recuperar ningún cuerpo. Pido perdón a Su Excelencia por este error.
Ingenuamente, la Compañía Gris se dejó guiar por los dos Trolls en la noche, para tratar de rastrear a Barden. Como era de esperar, los Trolls les engañaron y se perdieron en la noche. Habrán vuelto al Barrio Troll, a las tierras del Clan Afengeng.
Como conclusión, todos mis informadores me aseguran que los miembros de la Compañía Gris han demostrado una gran capacidad de trabajo en equipo. Los dos magos son poderosos, quizá demasiado para nuestros intereses. El Sabio de la Espada es, posiblemente, el mejor luchador del grupo. Baranwolf, sobre quien "K" había expresado dudas, es adecuado para el puesto de líder. Sigo pensando que Varmand Brenson es un espía del Templo del Sol, pero por ahora está actuando como un leal miembro de la Compañía. En cuanto al Berserker, Ris Nogweh, es un bruto ignorante como todos los seguidores del Toro Tempestuoso, pero resistió un conjuro confundidor de la líder Troll, y al parecer su capacidad de Presentir el Caos llegó a detectar trazas de Caos en los Nuevos Colmillos aún cuando éstos debían estar utilizando la Magia de Ocultación del Cacodemonio. No le subestimemos.
Como nota al margen, reitero la necesidad de controlar a los Nuevos Colmillos. Temo que son una manifestación más del poder del Ojo, y la cercanía de este incidente a la Explanada del Diablo me reafirma en mis sospechas.
Seguiré vigilando a la Compañía Gris e informándole sobre sus progresos.
El Silencio es nuestro arma entre los Enemigos.
B.