Víctor es el más fan de Star Wars de la familia. Dentro de poco cumplirá los catorce años (aunque a mí me parece que fue ayer cuando nació) y desde pequeño siempre le ha gustado todo lo que implique construir cosas. Tiene una mente ingenieril. Le encantan los Legos y, dentro de los Legos, los de Star Wars. Tiene la habitación llena de naves y en ocasiones se puede pasar la tarde entera haciendo vídeos en stop motion con sus stormtroopers, como si fuera un aprendiz de Ray Harryhausen :D.
Hace unos años, cuando consideré que ya podían disfrutar de ellas, les puse las pelis de Star Wars. De hecho, en su momento seguí la recomendación de los fans más locos de la franquicia y los vimos en el orden Episodio III (Una Nueva Esperanza), Episodio IV (El Imperio Contraataca), Episodio I (La Amenaza Fantasma), Episodio II (El Ataque de los Clones), Episodio III (La Venganza de los Sith) y finalmente, el Episodio V (El Retorno del Jedi). Los locos más locos aconsejan saltarse directamente el Episodio I como si no hubiera existido siquiera, pero oh sorpresa, a mis hijos les gustó. No es de extrañar: recordad que estas películas están dirigidas sobre todo a niños y adolescentes. Están pensadas para entretener.
Con el paso de los años, hemos ido al estreno de las pelis de la nueva trilogía (los personajes me gustan, pero los guiones, psé), hemos visto algunas series tipo Clone Wars (ellos entera, yo a cachos) y también nos hemos visto las pelis anexas. Confieso que lo que más me ha gustado de los últimos años de Star Wars ha sido Rogue One, que es por completo una peli de guerra.
Lo segundo que más me ha gustado estos últimos años ha sido The Mandalorian. Creo que ha sido la serie que mejor ha reflejado ese estilo de "Wester espacial" que forma una parte tan importante de la franquicia. La otra parte sería todo el tema de los Jedi, pero confieso que yo puedo disfrutar de algo de Star Wars sin necesidad de que haya un Jedi presente. Así que claro que disfruté con la presencia de los Jedi en The Mandalorian, pero el episodio que más se quedó en mi memoria fue justo aquel en el que sale un AT-ST que cumple por completo el rol de "dragón" o "monstruo imbatible". Y la ambientación totalmente western de cantinas, sheriffs, cazarrecompensas, habitantes de los páramos, pueblos solitarios...
Así que, cuando llegó El Libro de Boba Fett confieso que me ganó sobre todo por la ambientación. Mos Espa y Tatooine son lugares más que apropiados para ambientar partidas de rol, y ya sabéis que yo lo termino relacionando todo con el rol tarde o temprano :D. Así que ver a los moradores de las arenas, los trenes que atraviesan el desierto, los sindicatos del crimen, las bandas callejeras (con motos de colores) y todo el resto de componentes de una aventura tipo western espacial, a mí me ha gustado.
Hay quien dice que Temuera Morrison no sabe actuar y que no le imprime carisma al personaje, pero a mí me da el pego como tipo duro ya veterano que quiere hacer algo distinto a lo que lleva haciendo toda la vida. Es verdad que probablemente todos nos imaginábamos que iba a ser un poco más implacable y violente; algo así como un Tony Soprano con armadura ;). Pero el desarrollo del personaje me parece correcto. Solo me parece mal el hecho de que para ser creíble que se enfrentara a todos los otros sindicatos del crimen me parece a mí que debería haber tenido más tropas. Que las que tenía estaban bien, lo admito. Pero eran muy pocos. Ni con la peña del pueblo, que llegan en un par de camiones, me resulta creíble. ¡Hacía falta tener más minions en el palacio! ;). En términos de partida de escaramuzas, su bando tenía muchos héroes, un monstruo grande muy chulo... y muy pocas tropas de infantería corriente y moliente.
Con respecto a los dos capítulos de Boba Fett en los que Boba Fett no sale más de unos pocos segundos... os confieso que hubiera preferido que se hubiera quedado en un único capítulo. Que sí, que es importante para el desarrollo de Din Djarin, pero le quitan bastante protagonismo a Fett en una serie que se suponía que era suya. No me parecieron malos capítulos, pero lo hubiera preferido de otra forma.
Al final, lo importante para mí es que ha resultado una serie entretenida. La he ido viendo semana tras semana para que mi pobre hijo no se comiera demasiados spoilers. Y aún así se los ha comido. Le tengo dicho que no se tire el tiempo viendo vídeos de Youtube, pero aunque le tengo capado el tiempo de uso de móvil y ordenador, yo creo que se busca la vida para engañarme. En fin. El caso es que verla así, semana tras semana y con tus hijos, mola. La mayor pasa un poco de Star Wars, ya que lo suyo es el manga, y el pequeño es un espíritu libre que lo mismo ve la tele contigo que se pira a hacer otras cosas más interesantes. Pero el mediano sí que lo disfruta, y yo lo hago con él.
Me gusta también charlar con Víctor y explicarle que esto al final no deja de ser un entretenimiento. Hemos hablado bastante de Star Wars y de cuando no existía más que la trilogía original, el juego de rol de West End Games y las novelas. De cuando en cuando nos echamos alguna charla sobre lo distinto que es el tratamiento de ciertos asuntos, como el de la hipervelocidad (en el juego de rol se tardan días en llegar de un planeta a otro, pero en las pelis y series, da la impresión de que todos los planetas están a un par de minutos o un par de horas como mucho los unos de los otros). O de que las novelas dejaron de ser canon y que algunos personajes como Luke Skywalker tuvieron un desarrollo un poco meh en la nueva trilogía. Pero que precisamente por eso no hay que tomarse Star Wars demasiado en serio. No es coherente en muchos aspectos porque es un espectáculo visual y es un espectáculo porque sus autores quieren que vayas a ver sus pelis, compres sus muñequitos y te suscribas a Disney+. Que no pasa nada, es algo legítimo. Simplemente hay que tener en cuenta que perder el tiempo en redes, o incluso en la vida real, discutiendo sobre si tal o cual película o serie es una "traición" a unas supuestas esencias de un personaje o de la saga en su conjunto, es un poco inútil. Puede ser parte del entretenimiento, pero es un entretenimiento más tóxico.
Creo que prefiero simplemente verme un western espacial con mis hijos y disfrutar de un western espacial sin más pretensiones.
Saludetes,
Carlos